Recorre el cielo de Pineta una serpiente erizada, que sale del Portillo de Tella, en gris, y termina en la Suca, con su cabeza colorada.
Separa las dos vertientes, la Sur más tranquila y tumbada, y la Norte, más vertical y aérea. Las dos guardan sus secretos y hermosuras. Gurundué o Angones al Sur y todas las paredes, barrancos y desplomes a Pineta.

Hoy nos hemos ido a enamorar del vallón secreto que pasa entre Mallo Gran y Mallo Embasador. Con sus muros que dicen que no, pero si los acaricias, dicen que sí.
Para salir, al fin, a la punta de Angones*,  en el lomo de esta bella serpiente.

*una de las Puntas Verdes