Entre dos borrascas...
Entre dos borrascas y con la esperanza de ver el sol, ayer subimos al Cuezo con los esquís desde Espierba. Uno de esos sitios con poco desnivel en los que sueles estar tranquilo. Variado en el recorrido, pista, bosque y bojes. Un paso técnico y una bonita pala con algún pino salteado.
No vimos el sol y nos nevó.
Pero este año, no tocamos ni una piedra.
Una nieve profunda entre 40 y 50 cm polvo denso.
Una borrasca tras otra. Con cada nuevo frente, la subida de temperatura, incluso la lluvia, ayudó a sujetar la fría nieve y transformarla. Debilitando las placas de viento formadas por las fuertes rachas que también desnudaron aristas y lomos.
Podemos contar con una base bastante compacta, no muy fría, para esquiar con una cierta seguridad hasta los 30°-35°. Más allá, que crucemos pendientes fuertes o que las tengamos encima, nos tenemos que preocupar por la importante acumulación de nieve en algunos sitios y ser prudentes.